29 de enero de 2011

Por fin llega al mercado el USB 3.0

Todo son ventajas. Se mire por donde se mire, el estándar USB 3.0 se convertirá en los próximos meses una de las novedades más felices del ejercicio. Los principales fabricantes informáticos y de electrónica trabajan a marchas forzadas para incorporar cuanto antes esta nueva tecnología a sus nuevos equipos. No hay vuelta atrás.

La principal ventaja del nuevo formato es la velocidad en la transferencia de datos, ya que el USB 3.0 es diez veces más veloz que su antecesor. La transferencia de información de los accesos USB 3.0 fluye a 600 megas por segundo, frente a los 60 megas por segundo del anterior.

Ahorro de energía

La novedad también permite ahorrar energía, ya que los puertos están diseñados para desconectarse cuando no se utilizan, sin consumir recursos innecesarios en los ordenadores. Por lo tanto, se trata de una tecnología más ecológica y eficiente que la

El sistema Universal Serial Bus, puerto que permite conectar infinidad de dispositivos y periféricos con ordenadores, goza de absoluta popularidad entre los usuarios de dispositivos electrónicos.

Prácticamente todos los ordenadores y portátiles disponen de esta puerta de entrada, ya sea para datos almacenados en lápices USB o para conectar el ordenador con multitud de dispositivos compatibles.

Jordi García, director de Desarrollo de Negocio para Iberia en Kingston Technology, asegura a elEconomista "que muy pronto se popularizarán dispositivos USB de almacenamiento de datos de gran capacidad, por lo que el USB 3.0 se convertirá en estándar en 2011".

Tráfico bidireccional

Esta tendencia del mercado exige una mayor velocidad en la transferencia de información digital, ya sean fotos, vídeos, canciones, juegos copias de seguridad de documentos o películas en alta definición.

Los USB 3.0 permiten el tráfico bidireccional, con dos líneas para envío de información y otras dos para la recepción de datos, lo que contribuye en acelerar el intercambio de contenidos.

"Este año hemos empezado a vender llaves de memoria de 256 gigas, formatos que demandan sistemas más veloces que los actuales", apunta el directivo de la compañía líder en ese joven sector. La respuesta para todo ello es el USB 3.0.

Además, el nuevo estándar también reducirá a la mitad el tiempo empleado en la recarga de la batería de los dispositivos, con una intensidad de la corriente de 900 miliamperios, frente a los 500 del estándar anterior.

En este empeño, tanto los fabricantes de chips como los de software están dispuestos a subirse al carro 3.0 para disponer de drivers y equipos adecuados para este nuevo sistema.

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